Antes del Mundial de Rusia, le preguntaron a [[Pep Guardiola]] por sus favoritos para alcanzar el título. “Me gustaría que ganara España, porque ahy gente a la que le tengo mucho cariño ahí. Como también Alemania o Argentina”, explicó el técnico de [[Manchester City]] a fines del año pasado.
Lo que no sabía es que era él quien precisamente podía darle la suerte al nuevo monarca planetario. Las extrañas simetrías del fútbol determinaron que los dos últimos campeones del mundo, España y Alemania, se coronaron después de que Guardiola ganara su respectiva liga, una coincidencia que ahora podría favorecer a Inglaterra.
Mucho del camino ya se completó. Pep cerró una temporada histórica con el City en la Premier League para ser campeón e Inglaterra se metió entre los cuatro mejores del Mundial, emulando lo que ya había acontecido en las dos copas del mundo anteriores.
El 16 de mayo de 2010 ante 90 mil personas en Nou Camp, Barcelona derrotó a Valladolid. Dos meses después, en Sudáfrica, España fue campeón del mundo. El 25 de marzo de 2014, nuevamente con un rendimiento récord, Bayern Múnich se quedó con al Bundesliga. Cuatro meses después, Alemania fue campeón del Mundo en Brasi.
Una singularidad a la que se encomiendan los fanáticos de los Tres Leones antes de una jornada de miércoles donde esperan alcanzar la segunda final de su historia en los mundiales de fútbol.
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