Wayne Rooney se graduó de leyenda en la victoria del DC United ante Orlando City por 3-2. El astro inglés demostró toda su categoría con una terrible jugada que convirtió en un gol en contra, en anotación propia para ganar el encuentro.
Era la última jugada del partido y DC United tenía un corner a favor. David Ousted, portero del equipo local, subió a buscar el triunfo y estuvo cerca, pero salió una contraataque fulminante que parecía la derrota definitiva para el cuadro de Washington.
Will Johnson de Orlando se iba solo con arco descubierto para llevarse los 3 puntos, pero Rooney corrió como nunca y apareció en su mitad de campo como último hombre y con un genial barrida recuperó el balón, luego metió un perfecto centro al área y Luciano Acosta puso el 3-2 final.
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