La octava etapa del Rally Dakar 2025, que se desarrollaba entre Al Duwadimi y Riad, fue escenario de un accidente que involucró al piloto chileno Pablo Quintanilla.

En el kilómetro 133, Quintanilla cayó y quedó tendido en el suelo, lo que alertó a los pilotos cercanos. El argentino Luciano Benavides fue uno de los primeros en llegar y asistió al chileno en un momento crítico.

“Después del primer repostaje lo vimos a Pablo Quintanilla en el suelo, lo cual nos asustó mucho. Al principio lo vimos como un poco dormido y no estaba bien. Sentía dolor en la cabeza y se dormía, entonces lo mantuvimos despierto”, relató.

El angustiante accidente y rescate de Pablo Quintanilla

Benavides, junto con el piloto francés Adrien Van Beveren, se detuvo inmediatamente para ayudar a Quintanilla.

Tras asegurarse de su estado, Benavides pidió con urgencia la llegada del helicóptero para evacuar al piloto chileno.

Apreté todos los botones en la moto, no sabía qué más apretar para que lleguen. Nos llamaron de la organización y empezaron a hacer mil preguntas. Yo les pedía que manden el helicóptero lo más rápido posible y se habrán demorado unos 12 minutos”, añadió el argentino.

“Si no era él, iba a ser otro”

El accidente de Quintanilla tuvo un fuerte impacto en los pilotos presentes, quienes estaban expuestos a los peligros de una carrera extrema.

Benavides describió el lugar del accidente como “una zona muy rápida” y destacó que, aunque el roadbook no indicaba que fuera peligrosa, él consideraba que lo era.

“Si no era él, iba a ser otro, porque realmente estaba feo para pegarse”, sostuvo. Sobre el impacto psicológico de la situación, Benavides comentó que “hay que ser muy frío en ese momento porque fue un golpe fuerte. Y ver eso es duro porque te recuerda que estamos todos expuestos a ese tipo de accidentes”, reveló.

Pese a la gravedad del accidente, Quintanilla fue evacuado y trasladado al hospital para ser evaluado. Aunque en principio no se reportaron lesiones graves, ya se informó de que se trata de una lesión en el hombro.

Por su parte, tanto Benavides como Van Beveren continuaron con la etapa del Dakar. En reconocimiento a su acción de detenerse para asistir a Quintanilla, la organización del Dakar decidió devolverle los 31 minutos que Benavides había perdido durante el rescate.

“Lo ayudamos a quitarse las protecciones, lo pusimos en la camilla. Estuvimos en total unos 30 minutos parados y de ahí pudimos continuar”, explicó el piloto trasandino.

Esto permitió que el piloto argentino ganara la octava etapa de la competencia y ascendiera al cuarto lugar en la clasificación general, a tan solo nueve minutos del tercer lugar, ocupado por Van Beveren.