Bélgica, al igual que Chile, está en proceso de recambio en su selección. Y para eso contrató al técnico italiano Domenico Tedesco, quien hizo su debut en el duelo ante Austria, jugado en Bruselas.
Pero, los que siguen haciéndose un nombre en el elenco belga son los de siempre. Romelu Lukaku fue esencial para que los locales no tuvieran un desastroso debut de su técnico. El delantero del Inter de Milán no fue el mismo de la paupérrima final de Champions League.
Claro que el comienzo fue sinuoso para los belgas. Austria consiguió abrir la cuenta por medio de un autogol de Orel Mangala (22′), en un primer tiempo de grandes idas y vueltas en los pastos del Roi Baudoin.
Con el marcador encima, Bélgica salió en el complemento con otra mentalidad. Atacando y dejando espacios para el contragolpe, el cuadro del país dividido entre valones y flamencos llegó al empate gracias a un golazo de Romelu Lukaku (61′).
De ahí en adelante, pudo ser para cualquiera. De hecho, otro de los grandes rendimientos de los belgas fue Thibaut Courtois, quien fue el responsable de que el partido no volviese a ponerse cuesta arriba para los locales. No dejó ni pasar el aire a su portería.
Bélgica intentó y, en los últimos minutos, un tiro de Bakayoko rebotó en el travesaño, impidiendo la alegría del público local. De más está decir que, poco antes de ese remate, Lukaku, que prende con agua, le dio un pisotón a un defensa austriaco que fácilmente pudo derivar en su expulsión. El árbitro, sabiendo que faltaba poco para el final, resolvió con una amarilla.
Si bien en Austria se celebra el empate, hay que destacar que el país donde nació Mozart no le gana a los belgas desde 1959.
De esta manera, Austria lidera el Grupo F de las Eliminatorias para la Euro 2024, con siete unidades. Más atrás, Bélgica le sigue con cuatro y Suecia con tres. Estonia y Azerbaiyán cierran con tan sólo un punto.