Brasil no termina de digerir el trágico incendio que le costó la vida a diez jovenes cadetes del Flamengo en su residencia oficial, cuando le tocó vivir una historia parecida a otro equipo de Río de Janeiro: el Bangú. Según reportó Globoesporte, un incendio en su residencia de cadetes obligó a movilizar a los cuerpos de seguridad.
Hasta ahora se reportan tres heridos: dos jóvenes futbolistas y un vigilante. Los jugadores descansaban en la Comisión de Deportes de la Aeronáutica en la Zona Oeste de Río, cuando se desató el incendio. Inicialmente el club advirtió que eran tres futbolistas heridos, pero luego se corroboró que eran dos y un soldado.
“Todos los demás futbolistas fueron chequeados y se encontraron bien”, advirtieron los reportes.