Robinho y su amigo Ricardo Falco fueron condenados en segunda instanciapor el delito de violencia sexual grupal contra una mujer albanesa en 2013. Esto, según confirmó el Tribunal de Apelación de Milán este jueves.

En 2017, el jugador brasileño fue condenado tras haber participado en una violación grupal a una mujer de 23 años.El hecho habría ocurrido en una discoteca cuatro años antes de la sentencia.

Pese a todo,Robinho siguió con su vida e incluso estuvo listo para regresar al fútbol de la mano del Santos FC, pero todo quedó anulado gracias a la presión de los auspiciadores,quienes no querían que sus marcar se vieran involucradas con un agresor sexual. El regreso del jugador al Peixe quedó en nada.

Aunque el brasileño ya había sido condenado porun tribunal de Milán hace largos tres años, lo cierto es que su caso aún admite recursos, y según reveló Globoesporte, el deportistaplanea continuar alegando inocenciay junto a sus abogados harán los máximos esfuerzos para evitar la cárcel.

El tribunal puede ordenar la detención del jugador como medida preventiva.

“Los abogados de Robinho y Falco apelarán ante el Tribunal de Casación, un tribunal del sistema judicial del país equivalente al Tribunal Supremo Federal de Brasil.Sólo después de que se tramite el proceso en esa tercera instancia, un imputado puede ser declarado culpable de algún delito”, aclara la publicación.

Además, y como recurso desesperado por evadir la prisión efectiva, los abogados del futbolista intentaron desprestigiar a la víctima mostrando en la corte fotografías de ella bebiendo alcohol, expediente que no hizo cambiar de opinión a los jueces.

Pese a que la defensa de Robinho apelará hasta la última instancia, legalmente el tribunal ahora podría inclusosolicitar elarresto del futbolista como medida preventiva antes de la sentencia definitiva.