Triunfo de gran importancia de Colo Colo ante Junior de Barranquilla por los octavos de final de la Copa Libertadores. El cuadro albo mostró tranquilidad y consiguió un gol trabajado en el complemento, que permite ir con una victoria a buscar los cuartos a Colombia. ¿Cómo rindieron los jugadores? Mira el uno a uno:

Brayan Cortés (6,0): además del juego de pies, una de las características positivas del portero colocolino es que sabe salir a cortar cuando un delantero se lanza en solitario en ataque. Gracias a eso salvó a Colo Colo de un gol tempranero, a los 19’ cuando Enamorado quedó mano a mano y el iquiqueño supo responder. Fue un partido notable del guardameta albo, quien, sin duda es un jugador de Selección. El que diga lo contrario, que vea la seguridad que le otorgó a la escuadra de Almirón este martes.

Emiliano Amor (5,5): a veces, medio lerdo con la pelota en los pies. Pero, como no es lo que se le pide a su posición, pasa desapercibido. Su estatura da seguridad en defensa y es un arma en ataque. Con Falcón son la referencia directa de las pelotas detenidas. No sufrió exabruptos y consiguió un duelo limpio.

Maxi Falcón (6,0): el fútbol, así como los rendimientos individuales, muchas veces están marcados por detalles. El Peluca había tenido un tremendo primer tiempo, sabiendo moverse en el área colocolina. Pero, una jugada fortuita lo terminó marcando. Falcón dio un pase hacia atrás, a medias, y la pelota terminó en los pies de Bacca. Para su suerte, el colombiano falló y estrelló el balón en el poste (44’). Y bueno, basta de resaltar siempre lo malo. Lo cierto es que el uruguayo, en el mano a mano y en la marca personal, cumplió ampliamente y su empuje, aunque a veces termine en desbordamientos, contagia a sus compañeros.

Maxi Falcón fue otro de los puntos fuertes de Colo Colo | Photosport

Eric Wiemberg (5): no tuvo grandes complicaciones, aunque en el primer tiempo, las jugadas de Junior pasaron por su banda. Reparó aquello sacándole una pelota importante a Bacca cuando el reloj marcaba 60’. Sin sobresaltos, se quedó en cancha hasta el final del partido.

Mauricio Isla (5,5): para haber llegado recién y estar jugando unos octavos de final de Copa Libertadores después de estar un rato sin club, parece que lo de Isla es normal. ¿Partido bueno? No. ¿Partido malo? Tampoco. Es interesante resaltar que es notorio el empuje que crea en la cancha y cómo los pases que salen de sus botines llevan una calidad distinta al resto. Falta aún que desborde un poco más en ataque, pero por el momento se puede visualizar un buen futuro del Huaso en Colo Colo.

Esteban Pavez (5,8): bien en la recuperación y en las charlas cara a cara ante los jugadores de Junior. Es el que mete empuje, ganas y pierna fuerte. Un líder innato, que sabe decirle las cosas al rival para sacarlo, incluso cuando no es un partido tan caliente. Su aporte futbolístico en el medio es casi siempre impecable, por lo que sólo hay que volver a resaltarlo, una y otra vez.

Vicente Pizarro (6,5): no solamente recibió una falta que debía ser penal para Colo Colo, sino que también marcó el gol del triunfo albo. Vicente Pizarro estuvo ordenado y pulcro en sus labores, sobre todo ofensivas. Se entendió bien con Palacios y no perdonó, ni le temblaron las piernas cuando hubo de definir.

Vicente Pizarro tuvo recompensa para un buen partido | Photosport

Carlos Palacios (6,8): habrán muchos detractores de la Joya, pero lo que hizo en la noche de martes en el Monumental es digno de resaltar. El volante de Colo Colo asumió funciones de “10” y vaya qué rendimiento tuvo. Fue el mejor de la cancha y la parte defensiva de Junior de Barranquilla no supo descifrarlo. Gran parte del triunfo del Cacique se debe a su buen trato de balón y su atrevimiento. Cuando no anda por las nubes creyéndose el mejor, es el mejor, eso es lo extraño. Por ahora, más que analizar esto último, sólo es hora de aplaudirlo.

Marcos Bolados (5,3): poco de Bolados ante Junior. Si bien un par de centros suyos fueron de las más peligrosas del primer tiempo para el Cacique, no fue un agente ofensivo que creara gran diferencia. Su ausencia hizo que el propio Almirón decidiera uno con mayor expertiz por la banda, como es Zavala, que lo sustituyó a los 65’.

Javier Correa (5,3): se nota que aún le falta ritmo. El delantero argentino y ex Estudiantes de La Plata no se halló mucho en el Monumental. No obstante, se nota que es un jugador de calidad, porque aún claramente lejos de su mejor forma, el delantero se creó un par de oportunidades dignas de nueve de área, como un cabezazo en el primer tiempo, anticipando a la defensa de Junior. Hay que tenerle paciencia. Salió a los 65’ por Guillermo Paiva.

Lucas Cepeda (5,5): partido extraño para Lucas Cepeda. Le tocó entrar en el último minuto por Arturo Vidal, lesionado en el calentamiento, y tuvo que hacer valer la confianza del técnico. Pero, no estuvo fino en esta noche en Macul. Le faltó un poco de calma a la hora de definir, como cuando a los cinco minutos recibió prácticamente solo un pase de Bolados y terminó mandándola a cualquier parte. Desbordó y estuvo activo, eso no se puede negar. Pero estuvo lejos de esa diferencia que marca cuando entra desde la banca. Salió a los 75’ por Leo Gil.

Cristian Zavala (5): entró a los 55’ por Marcos Bolados. Logró tener un poco más de profundidad que Bolados, aunque, paradójicamente, lanzó menos centros al área. Esto se debe, principalmente, a que tras su ingreso pronto salió Javier Correa, que eran al que más buscaban.

Guillermo Paiva (5): entró a los 65’ por Javier Correa. Con mejor fisico que el argentino, el guaraní consiguió sacarse marcas, pero no remató al arco, por lo que aún sigue con cierta sequía. Lo quieren en el plantel, así que esperan que se le abra pronto el arco.

Óscar Opazo (5,3): entró a los 65’ por Mauricio Isla. No se marcaron grandes diferencias con el Huaso, aunque defensivamente estuvo una pizca superior

Leo Gil (-): ingresó a los 75’ por Lucas Cepeda. Poco qué decir del Colorado, que se lanzó un par de veces en ataque, pero con más voluntad que fútbol.