El mal comportamiento que tuvo un importante grupo de hinchas de Colo Colo durante su estancia en Mendoza, para el duelo por Copa Libertadores ante Godoy Cruz, no pasó inadvertido para las autoridades de Argentina.
Además de un seguidor albo que está en la cárcel por abuso sexual y en riesgo de pasar 20 años en la cárcel, hubo otras ocho personas, tres mujeres y cinco hombres, recibieron una pena de tres años de prisión en suspenso por robo agravado a un kiosco ubicado en pleno microcentro de esta ciudad.
Por decisión del Gobierno de Argentina, se ordenó la extradición y expulsión definitiva de estos hinchas de Colo Colo, quienes no podrán entrar en el país nunca más. De hecho, Gendarmería Nacional los llevó hasta la frontera con Chile.
“Durante el Gobierno del presidente Javier Milei, Argentina no va a ser tierra fértil para la llegada de delincuentes“, aseguró el portavoz del Ejecutivo, Manuel Adorni, en un punto de prensa en la Casa Rosada.
Incidentes de hinchas de Colo Colo traen consecuencias
Además de estas nueve personas que quedaron detenidas, cabe recordar que a través del Plan Tribuna Segura, otros 22 fanáticos albos quedaron con prohibición de ingresar a Argentina tras ser detenidos por personal policial de Mendoza.
“Los detenidos están involucrados en actos de violencia, robo y abuso sexual previos, durante y después del partido. Actualmente se encuentran a disposición de la Justicia y hemos solicitado a Migraciones su expulsión y la prohibición de regresar al país”, indicó el Ministerio de Seguridad de tal nación.
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