En Unión Española se vivieron momentos de tensión el fin de semana pasado, cuando Universidad de Chile los venció por 2-0 en un partido correspondiente a la sexta fecha del Campeonato Nacional.

Todo, porque según los rumores una vez que los hispanos estuvieron en el camarín, dos jugadores se habían increpado, donde algunos decían que hasta se habían ido a las manos.

Los apuntados eran Rodrigo Piñeiro y Gonzalo Espinoza, alguno fue el propio entrenador de Unión Española, César Bravo, quien detalló la situación.

“Sí, no se puede desconocer. Hubo un altercado, una calentura del momento, creo que pasa mucho, me pasó como jugador también. Es lamentable que haya ocurrido eso, con dos jugadores que se llevan bastante bien dentro del plantel”, comentó Bravo en la conferencia realizada en la ANFP por el clásico de colonias que jugarán ante Audax Italiano.

El plantel hispano quedó herido tras la derrota con Universidad de Chile.

El entrenador, si bien le restó importancia a lo sucedido, aseguró que todo había quedado en buena relación y que no pasó más allá de una reacción dentro del camarín.

“Después, a los minutos terminaron abrazados y pidiéndose disculpas a ellos y al resto del plantel, fue un error en un momento de calentura y eso quedó ahí. Son dos jugadores que se llevan bien, es la frustración de haber perdido un partido en el que hicimos un desgaste y no se nos dio, así ocurren estas niñerías que pasan en un plantel”, destaca Bravo.