El presidente de la ANFP, Pablo Milad, nuevamente sacó la voz por los hechos de violencia ocurridos el fin de semana en el Clásico Universitario, donde se tuvo que suspender el encuentro de Universidad de Chile contra Universidad Católica en Concepción.
Si bien nuevamente se refirieron a las medidas que quieren proponer, donde destaca un nuevo código 103, además de incorporar tecnología para que no vuelvan a los estadios personas con causas pendientes, también hubo espacio para el análisis del fútbol chileno.
Una situación donde el mandamás de la sede en Quilín se expandió para explicar que no existe una crisis que sólo afecte al fútbol, porque es algo que va más allá de la sociedad y que entre todos deben seguir adelante.
“El fútbol chileno no está en crisis. Hay una situación país que está en crisis respecto a la violenciay eso es un hecho que todos sabemos, que cada día lo vemos con el miedo que tenemos por salir en la noche o conducir un auto por calles no tan transitadas”, comenzó explicando.
“Nosotros tenemos que estar más unidos que nunca en sacar a esa gente de los estadios, que no vuelvan más a los estadios, valorando y dando preferencias a las familias y la gente que ama a las instituciones, que no les quiere hacer daño, que quiere ver un espectáculo y disfrutar de sus equipos”, enfatizó.
En ese sentido hace un llamado a que “el Estado tiene la función de mantener el orden y la seguridad independiente de donde sea”.
“Hoy queremos que sí nos ayuden, que se suban a este barco, que se sumen a esta disposición que tenemos de cambio, porque no es un problema solo de nosotros, sino que también es una situación país”, precisó.
Medidas
Dentro de las medidas que quiere incorporar la ANFP está el código 103, para prohibir el ingreso de cualquier persona que tenga causas pendientes, donde además quieren incluir modificaciones para también restringir el acceso a deudores de pensión alimenticia.
Eso no es todo, porque quieren sentarse a conversar sobre la utilización de tecnología, para la identificación facial, la que tendría que ser operada por Carabineros.
Una situación donde hacen la invitación al gobierno, además de los legisladores, para avanzar todos juntos en la seguridad de los recintos deportivos.