Poco antes del mediodía, el gobierno entregó un comunicado muy claro: "La Dirección de Prensa de la Presidencia comunica que S.E. el Presidente de la República, Gabriel Boric Font, ha aceptado la renuncia de Manuel Monsalve Benavides al cargo de Subsecretario del Interior y ha nombrado en su reemplazo a Nicolás Cataldo Astorga".
A partir de ese minuto, se desató el caos. ¿Por qué? Es que Cataldo, quien se desempeñaba como subsecretario del Ministerio de Educación, quedó en el centro de la tormenta cuando la prensa oposición reflotó varios tuiteos del profesor de Historia y Ciencias Sociales de la Universidad de Valparaíso.
El tuiteo de la polémica, que fue escrito el 1 de septiembre de 2011, decía "Carabineros torturadores, como los peores tiempos de dictadura".
Ante la situación, la UDI reaccionó con molestia. "Espero que este nombramiento no se lleve a cabo. Si es que esta persona llega a la subsecretaría, evidentemente que se congelan todos los diálogos con el gobierno y esta persona será declarada persona non grata en el Congreso, no podrá entrar a comisiones, a la sala", dijo el jefe de bancada de la UDI, Jorge Alessandri, a T13.
Con tal situación, la ceremonia de cambio de gabinete demoró más de 90 minutos mientras se resolvía qué hacer.
Después de mucha espera, la solución fue concreta: dejar sin efecto el nombramiento de Cataldo, por lo que Manuel Monsalve se mantiene como subsecretario del Interior, impidiendo su cambio a la Secretaría General de la Presidencia.
Luego comenzó la ceremonia.