“Desde el punto de vista económico estamos enfrentando dos años muy, muy complicados”. El expresidente del Banco Central, Roberto Zahler, aseguró que Chile podría entrar en estado de recesión durante el 2023 y quitó responsabilidad al Gobierno del Presidente Boric del panorama económico nacional.

En entrevista con Diario Financiero, el expresidente del ente emisor analizó el escenario macroeconómico que enfrenta el país, aseverando que Chile se encuentra en “estanflación, aunque suene terrible”.

Dentro de dicho contexto, el economista prevé “que este año vamos a terminar creciendo al 2%, que no es un mal crecimiento, pero el próximo año lo más probable es que tengamos una caída del Producto en el contexto de una inflación todavía muy alta” y que la recesión durante el 2023 “es bastante inevitable por un tema estadístico”.

En cuanto a lo que queda del 2022, Zahler, señala que “el crecimiento del tercer y cuarto trimestre en 12 meses será negativo y lo llamaría brusco si consideramos que en el primer semestre crecimos en torno al 6% y cerraremos el año en 2%. Además, con una inflación muy alta, de dos dígitos por lo menos hasta fin de año, independiente de lo que esté haciendo el Banco Central, por la propia inercia inflacionaria. Hacia fines del próximo año proyecto que la inflación estará en torno al 4%, pero a fines de este año se ubicará sobre 10%”.

Eso sí, para el economista, el 2024 el escenario económico del 2024 será completamente distinto y se retomaría la senda del crecimiento, “donde la brecha entre el Producto potencial y el efectivo se habrá cerrado y podemos crecer con baja inflación y un menor déficit en cuenta corriente. El crecimiento potencial estaría entre 2% y 2,5%”.

Zahler también aseguró que el Gobierno del Presidente Boric y su política económica no tiene responsabilidad del panorama económico, “por el contrario, se están haciendo las cosas bien, en un entorno externo e interno muy complejo. La política fiscal es muy prudente. Los fondos soberanos, que el año pasado se usaron fuertemente para financiar parte del exceso de gasto del sector público, se recuperaron en forma importante (más de US$ 5.000 millones en el primer semestre de este año), hubo muy poco aumento de la deuda pública, lo que deja espacio para afrontar la coyuntura si se pone más compleja”, aseguro el expresidente del ente emisor.