Chile estará a cargo de la Vicepresidencia de la Comisión Interamericana de Mujeres de la Organización de Estados Americanos (OEA) entre el 2022 y 2025. Será la Ministra de la Mujer, Antonia Orellana, quien represente a Chile ante la comisión regional.

La votación se llevó a cabo este jueves 26 de mayo y Chile obtuvo 17 de los 34 votos, con los que logró adjudicarse la vicepresidencia de la instancia.

El Ministerio de la Mujer señaló, a través de un comunicado, que el rol de Chile en la Comisión Interamericanas de Mujeres será “fortalecer la agenda continental de género, promover la participación de organizaciones feministas, contribuir a mejorar la vida de millones de mujeres y niñas y no retroceder en los avances ya alcanzados por las mujeres”.

Además, la ministraOrellanavaloró la haber conseguido la vicepresidencia en uno de los organismos internacionales más importantes para la región. “La Comisión Interamericana de Mujeres fue una conquista del movimiento sufragista continental, fue fundada en 1928 antes de que las mujeres chilenas pudiéramos siquiera votar y, por lo tanto,para nosotras era muy importante tener presencia a través de una de las vicepresidencias, para así cumplir un rol de cuidar a nuestro continente de retrocesos”, comentó.

“Sabemos que en muchos de los problemas que tienen las mujeres en Chile hoy, hay factores que son comunes en todo el continente: la violencia, la crisis de los cuidados y también la necesidad de garantizar los derechos sexuales y reproductivos. Lo que hemos hecho aquí es fortalecer la mirada de que cuando se ponen en duda nuestros derechos en un país, eso inmediatamente tiene repercusiones en otro y por lo tanto necesitamos estar firmes y coordinadas a nivel interamericano para defender lo que ya son derechos ya sentados en el sistema internacional y que aún nos falta por cumplir”, complementó la autoridad.

¿Qué es la CIM?

La Asamblea de Delegadas de la Comisión Interamericana de Mujeres (CIM) de la OEA es una instancia regional que reúne a las ministras de la mujer del continente (o a la autoridad equivalente) para definir agendas de género y debatir soluciones políticas para mejorar la calidad de vida de las mujeres y niñas. Su versión 39 tuvo como eje central el fortalecimiento de alianzas y articulaciones para asegurar que las mujeres y el enfoque de género estén en el centro de la recuperación económica post-COVID19.