La historia de César Munder, el delantero cubano que saltó de las divisiones inferiores a la titularidad de Universidad Católica, es tan vertiginosa como su fútbol. El juvenil sumó ayer su segundo partido consecutivo como titular, ante Huachipato, y se abre paso en el fútbol chileno de la mano de Beñat San José.
Es la culminación de la primera parte de su sueño, que forjó en su cabeza en las “pichangas” que jugaba en la isla caribeña. Así lo recordó en agosto del año pasado al diario La Tercera. “No es que el fútbol esté recién naciendo en Cuba. Es muy masivo, pero recién ahora se le está dando mayor énfasis. Recorres las calles y están llenas de niños jugando pichangas, como le dicen acá. Uno piensa que el béisbol se quedó atrás”, asume.
Pero antes de su estreno contra San Luis en Quillota y el bis ante Huachipato en San Carlos pasaron cinco años de preparación en Chile. “Un día jugando por La Habana el torneo nacional, no llegaron los árbitros. Ese fue el momento en que decidí que debía irme, porque no iba a triunfar. Es la verdad, porque a lo máximo que podía aspirar era a jugar la liga nacional, pero nada más”, reconoció en la citada nota.
Tenía una puerta de salida. Su padre fue funcionario del régimen cubano, se vino a Chile y se casó con chilena. Luego invitó a sus hijos, que llegaron a fines de 2012. “No soy balsero, ni gusano, ni desertor. Llegamos legalmente a Chile. Me vine gracias al Permiso de Residencia en el Exterior de mi papá. Él, al estar casado con una chilena, me permitía viajar sin ningún problema. Eso fue el 28 de diciembre de 2012”, refrendó César Munder.
Con cinco años en Chile, sigue con nacionalidad cubana, pero cumple los requisitos para optar por la chilena y posteriormente vestir la camiseta roja, que es uno de los anhelos del delantero en el profesionalismo, justo en la generación de la Sub 17 que fue al Mundial de India. “Estoy esperando que todo esté en regla, pero uno de mis sueños es vestir la camiseta de la selección chilena”, completó.
“Es un chico muy aplicado, hay que felicitar a los ‘profes’ de la cantera, no solo en lo futbolístico, sino en lo humano, porque es un chico muy aplicado, muy serio y muy humilde y creo que tiene unas cualidades muy completas”, lo definió anoche Beñat San José, el primero que apostó por Munder. Aunque hoy varios se suman a la motivación.
Fotos: Agencia Uno