Kike Salas es una de las promesas del Sevilla FC. Sin embargo, hoy no está haciendo noticia por eso, sino porque está envuelto en un escándalo que podría acabar con su carrera.
El jugador de 22 años, pieza clave para el equipo en la temporada 2023-24, está siendo investigado por, presuntamente, forzar tarjetas amarillas en partidos de Primera División, con fines de apuestas ilegales.
La detención de Kike Salas
Salas fue detenido el martes, aunque ya fue liberado. El jugador habría pactado con conocidos para provocar amonestaciones intencionadas en ciertos partidos, favoreciendo las apuestas ilegales en las que su entorno estaría involucrado.
El joven jugador ya declaró ante un juez. Se le investiga por un posible delito de estafa, aunque el Sevilla FC no ha emitido ningún comunicado al respecto. Por su parte, La Liga pidió intervenir como parte acusadora en este caso.
El árbitro Javier Alberola Rojas muestra una tarjeta amarilla a Kike Salas durante un partido de LaLiga el 20 de septiembre de 2024 (Getty Images).
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Problemas para el Sevilla
El impacto de este escándalo en el Sevilla es considerable. Salas fue un jugador importante para el equipo durante la pasada temporada, destacando por su capacidad defensiva y su liderazgo en el campo.
El futbolista acumuló 10 tarjetas amarillas, de las cuales siete fueron en las últimas nueve jornadas. Este hecho despertó sospechas en las autoridades, ya que muchas de esas amonestaciones ocurrieron en los minutos finales de los partidos, en circunstancias poco claras.
Si el Sevilla FC decide apartar a Salas mientras se esclarece su situación legal, el equipo se verá obligado a buscar alternativas en el mercado de pases o en su propio plantel para cubrir su ausencia, lo que podría afectar su planificación deportiva.
Kike Salas de durante un partido de LaLiga entre el Villarreal y el Sevilla el 11 de mayo de 2024 (Getty Images)
Repercusiones en el mercado europeo
Antes de la detención, Kike Salas había atraído el interés de varios clubes europeos, entre ellos Lazio.
Sin embargo, el escándalo podría perjudicar gravemente su valor de mercado. La incertidumbre sobre su futuro, sumada a la mancha en su historial, dificultará que otros equipos se aventuren a ficharlo, incluso si logra demostrar su inocencia.
El contrato de renovación que firmó Salas con el Sevilla hasta 2029 parecía un paso firme hacia la consolidación de su carrera en el club. No obstante, ahora este acuerdo podría estar en peligro.
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