Cagliari no se anduvo con vueltas y sancionó duramente a tres hinchas por actos racistas los cuales fueron expulsados de por vida del club.

Estos hinchas entonaron canciones xenofobas contra diversos jugadores que enfrentaron al Rossoblu.

El presidente de la Federación Italiana de Fútbol, Gabriele Gravina, felicitó la medida que tomó el Cagliari. "El fútbol italiano está combatiendo sin pausa al racismo y por eso quisiera felicitar al Cagliari y a su presidente, Tommaso Giulini, por la intransigencia que demostró con esta decisión, que está a la vista de todos", aseguró el dirigente.

Agregando que "otras instituciones imiten el ejemplo y sigan por este camino".

Uno de los afectados por los cantos y dichos de los fanáticos sancionados fue Romelu Lukaku el que se quejó amargamente en ese momento: "Estamos en 2019 y en lugar de avanzar vamos hacia atrás. Pienso que como jugadores debemos estar unidos y tomar posición frente a este problema con el objetivo de conservar este deporte limpio y agradable para todos".