La selección femenina de Marruecos también ha hecho historia. Las Leonas del Atlas lograron una clasificación inédita al Mundial y además, disputaron la final de la Copa Africana de Naciones. Si bien cayeron por 2-1, hicieron un tremendo torneo y se instalaron en la definición del título contra todo pronóstico. Las grandes favoritas eran Nigeria, cuadro que ha sido once veces campeón del torneo y que fueron eliminadas por las marroquíes en semifinales. 

La Federación Marroquí de Fútbol (RMFF, por sus siglas en francés), comenzó un trabajo serio y a largo plazo en el fútbol femenino. El primer paso que mostró evidente compromiso, fue la organización de la Copa Africana de Naciones de este año. Las seleccionadas como anfitrionas, generaron mucho interés de parte del público. 

Un dato para explicar la magnitud de lo que generaron las Leonas del Atlas, es que el estadio Moulay Abdallah de Rabat, recinto que albergó la final, anotó un récord de asistencia para una partido femenino en África: 50.000 espectadores. Las entradas para presenciar el partido entre Marruecos y Sudáfrica se agotaron dos horas antes del incio del encuentro. 

La mejor jugadora de la competición africana, fue la capitana del conjunto marroquí Ghizlane Chebbak, y dijo que "teníamos que hacer honor al fútbol femenino de nuestro país para demostrar a los padres de todas las niñas de aquí, que es posible triunfar a través del deporte, pero también hay que ser apoyadas por el público. Así que hicimos todo lo posible por demostrarlo", aseguró la jugadora del FAR Rabat al portal Sofoot.

El plan de la Real Federación de Fútbol de Marruecos pasó por momentos difíciles. La pandemia fue uno de ellos, ya que tuvieron que hacer un llamado para que la FIFA pudiese contribuir y recibieron una subvención por 500.000 dólares para las categorías femeninas. Esos fondos fueron utilizados para poner en marcha el gran proyecto que quería ejecutar. 

Eso sí, no partían de cero. El 2019 la RMFF ya había fundado la Liga Nacional de Fútbol Femenino presidida por Khadija Illa, dirigenta del equipo femenino El Aaiún. La federación instó a que distintos clubes crearan su rama femenina para poder competir en la categoría y el mismo ente rector, iba a asumir los salarios de las futbolistas de primera y segunda división junto a sus cuerpos técnicos y equipos médicos. 

Uno de los resultados de esta serie de avances que propusieron los dirigentes del fútbol marroquí, terminó con la clasificación histórica de su selección femenina a un mundial. Después de vencer a su símil de Botsuana en los cuartos de final de la Copa Africana de Naciones, las futbolistas de Marruecos lograron su boleto al Mundial de Australia y Nueva Zelanda de 2023.