La campaña de Santiago Wanderers ha dejado caras largas en Valparaíso. El Decano solo suma un punto en sus últimos cinco partidos y de momento está penúltimo en las dos tablas que definen a los equipos que descenderán al término de la temporada.

El blanco de las críticas por el desempeño del equipo es su entrenador, Miguel Ramírez. Pero aunque ya no cuenta con el apoyo unánime del directorio, una traba económica impide su destitución.

Según El Mercurio de Valparaíso, en la mesa wanderina "asumen que ello (el despido) es casi imposible debido a que la institución no posee los 150 millones de pesos que costaría poner fin al vínculo del DT".

 

La clave estará en el próximo partido del cuadro porteño, el próximo 21 de marzo en el Puerto, cuando reciba a Curicó por el Campeonato Nacional. Si no hay un resultado positivo, la dirigencia espera actuar.

"La idea sería negociar con el entrenador y llegar a un acuerdo que rebaje el monto de su indemnización, puesto que ni hoy ni en dos semanas existirá el dinero para cancelar la totalidad del monto que cuesta la desvinculación de Ramírez y su staff", asegura el diario de la Quinta Región.

De todas formas, la intención de la mesa es contar con alternativas para reemplazar a Ramírez en la banca y un plan para encarar la segunda parte del campeonato con nuevos refuerzos.