Tras su bullada salida de Colo Colo en 2015, todos pensaban que la dupla de Héctor Tapia y Miguel Riffo quedaba para siempre en el olvido. Si bien en 2020 volvieron a reunirse para asumir juntos en Deportes Antofagasta, la gloria volvería a sus brazos en Primera B donde se acaban de convertir en campeones con Coquimbo Unido.
“Feliz. Este es un regalo primero para el esfuerzo que hicieron los jugadores, las familias y en especial a la región que ha tenido un año difícil por la pandemia, el estallido social. Este es un regalo de los jugadores para la región, así que lo disfruten porque el equipo nuevamente el equipo está en Primera”, comentó Tapia en TNT Sports.
Para Tapia el conseguir rápidamente el objetivo tiene que ver por el trabajo realizado por el grupo y el esfuerzo de las familias, que han brindado su apoyo en todo momento.
“Nosotros nos trajo la dirigencia de Coquimbo para un trabajo, no hacerlo en el primer año, porque es muy difícil. Pero desde el comienzo existió una conexión con el grupo, ya habíamos dirigido a algunos de ellos. Son torneos difíciles, pero lo importante es que la perseverancia fue tema fundamental y trabajar con un grupo nuevo. Al club en general y todos hicieron un trabajo para poner coronarlo”, destaca Tapia.
Eso sí, para Tito lo más fundamental ha sido volver a contar con el apoyo de Riffo, con quien escribió en este año con dos objetivos logrados en los equipos que les tocó estar.
“Volver a trabajar con Miguel, que en este año hemos tenido dos buenos resultados, dejar Antofagasta en la Sudamericana y volver a Coquimbo a Primera. Contento, de conseguir esto con un amigo del alma y es un regalo a nuestras propias familias, que son las que están empujando, comiéndose el día a día, con mucho viaje, mucho partido y tanto esfuerzo tiene su recompensa”, cerró.
