Arturo Vidal entró a los 73 minutos en la goleada por 5-1 del Barcelona contra Olympique de Lyon, por la revancha de los octavos de final de la Champions League en el Camp Nou.
El chileno ingresó con el parcial 2-1, cuando los visitantes intentaban poner el segundo tanto que les daba la clasificación. Y Vidal puso la garra en el mediocampo, coincidiendo con el “turn-on” de la aplanadora culé.
Ya con el 4-1, Nabil Fekir trató de irse con espacios en tres cuartos de cancha, pero Vidal se metió con todo para arrebatarle el balón con coraje y cortar la jugada que terminó en una falta de Ivan Rakitic.
Barcelona ya tenía ventaja de sobra, pero la garra del chileno al pelear el balón y diluir el peligro como si fuera de vida o muerte desató la ovación a pleno del Camp Nou para el Rey Arturo.