Fue el 19 de febrero cuando Leandro Fernández se le abrió el arco en el Campeonato Nacional. Su víctima fue la misma que enfrenta esta noche con Universidad de Chile y donde el técnico Mauricio Pellegrino confirmó su titularidad en Santa Laura: O’Higgins.
Tras ese gol, en la primera rueda del torneo, el delantero argentino marcó en los dos partidos siguientes, tomando un aire para ganar protagonismo en el equipo. Justo lo que necesita la U para volver a la pelea en la tabla de posiciones.
Goles
Esa tarde calor en Rancagua el reloj marcaba los 94 minutos cuando Fernández abrió el marcador para Universidad de Chile, siendo la primera vez que se vio el baile característico de sus celebraciones.
Tras el gol ante los celestes, repitió dosis en el triunfo ante Curicó Unido y en el empate contra Unión La Calera, en el reducto de Plaza Chacabuco.
Fue el 3 de marzo ese partido ante los cementeros, donde se apagó la pólvora para el delantero azul, que tuvo que esperar, con suspensiones y un problema respiratorio de por medio, hasta el 30 de julio para volver a celebrar.
Por lo mismo, hay optimismo en el papel que pueda tener Fernández en la noche en Independencia, siendo un rival al que ya le convirtió y por las rachas de goles que tiene acostumbrado a marcar el argentino.
Una situación, que, tras el tanto ante Magallanes del fin de semana pasado, abre nuevamente la oportunidad y el arco para el delantero, que quiere seguir subiendo en su escala de anotaciones. ¿Será cábala?
