Este sábado Serena Williams protagonizó un show de proporciones en la final del US Open, donde perdió frente a la japonesa Naomi Osaka por 6-2 y 6-4 en una hora y 21 minutos.

La estadounidense perdía por 6-2 e igualaba 1-1 en el segundo set, cuando su entrenador le dio una indicación desde la tribuna, lo que está prohibido, por lo que Williams recibió una advertencia del referee.

Luego, Williams perdió su servicio y rompió enfurecida su raqueta contra el piso, por lo que el juez la castigó con un punto. Esto enojó aún más a la tenista norteamericana, quien le faltó el respeto al árbitro y entre otras cosas lo llamó “ladrón”.

En consecuencia al referee no le quedó otra posibilidad que darle un game completo por ganado a la japonesa. El escándalo terminó con llanto y una triste celebración de Naomi Osaka, quien además fue abucheada.