Aunque dejó la banca del Arsenal después de 21 temporadas ininterrumpidas, el entrenador [[Arsene Wenger]] tiene la agenda llena de eventos. Pero ninguno como el que celebrará este viernes en Monrovia, capital de Liberia, donde será recibido por el presidente George Weah.

El ex delantero y único africano ganador del premio al Mejor Jugador del Mundo, en 1995, llegó al Mónaco de Francia por expresa recomendación del técnico francés, cuando con 21 años despuntaba en las ligas de su país. Ahí comenzó una trayectoria brilante que lo paseó por PSG, Milan, Chelsea, Manchester City y Marsella.

Por eso le hará entrega de la más alta distinción honorífica de ese país a don Arsenio: el título de Gran Comandante y Caballero de la Orden de la Redención Africana -Knight Grand Commander of the Humane Order of African Redemption-, una presea que no ha dejado de generar polémica en ese país.

Pero Weah contestó a la crítica y señaló que no se trata de una distinción que premie su beneficio personal. “Arsene ha contribuido al deporte en África y ha concedido muchas oportunidades a los africanos. Me tomó como si fuera un hijo y junto a Dios, sin él no hubiera tenido chance de triunfar en el fútbol de Europa”, explicó el mandatario.

Por su parte, Wenger reconoció su orgullo por el nombramiento. “Recuerdo cuando vi por primera vez a George Weah en Mónaco, llegó un poco perdido, sin conocer a nadie, sin que nadie lo reconociera. Y llegó a ser el mejor jugador del mundo en 1995 y hoy el presidente de este país”, señaló el ex entrenador de [[Arsenal]].

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