El pasado fin de semana Loris Karius recorrió el mundo con sus errores en la final de la Champions League contra Real Madrid. El arquero alemán del Liverpool lloró y pidió perdón tras su jornada fatídica en Kiev.

Pero el arquero boliviano de Huachipato, Carlos Lampe, no quiso ser menos y frente a Estados Unidos recordó que errar es humano y regaló un bonito condoro.

La selección del Tío Sam se imponía por 1-0 en Pennsylvania cuando el balón llegó a las manos de Lampe. Salió jugando con las manos hacia el costado derecho, recibió de vuelta y el globito no le resultó.

Joshua Sargent robó el balón en el área y superó el achique del boliviano para poner el 2-0 parcial. El encuentro terminó 3-0 para Estados Unidos.

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