Aunque estéticamente fue muy resistido, el halo llegó para quedarse como uno de los sistemas de seguridad más polémicos de la Formula 1 en el último tiempo. Pero el dispositivo que cubre la cabeza del piloto en el coche dio hoy la mejor prueba de su utilidad y salvó a Charles Leclerc de un peligrosísimo final.
En la salida del GP de Bélgica, Fernando Alonso recibió un toque de Nico Hülkenberg que hizo volar por los aires a su McLaren. En el descontrol, el carro se subió al Sauber de Leclerc y el halo fue el que impidió un desenlace más dramático.
El piloto monegasco abandonó la competencia pero su auto quedará como pieza de colección, ya que el golpe con el McLaren le quitó toda la pintura blanca al halo. “Definitivamente el halo ayudó hoy”, sentenció el de Sauber en la ronda de preguntas.
Por su parte, Alonso dijo que el accidente de hoy fue “una buena prueba” para el dispositivo que se hizo obligatorio para la categoría en 2018. “Salvará vidas”, agregó Nico Rosberg con una imagen del halo dañado. “Después de esto, podemos decir que el halo es hermoso”, completó Felipe Massa.
Foto: Formula 1