El coronavirus no le da tregua a nadie, y los efectos económicos que ha causado la cuarentena y el confinamiento, ha golpeado mucho a los microempresarios a nivel mundial.

Es lo que ocurre con Manolo Cáceres, el famoso hincha de la selección española que acompaña a su equipo a todos lados con su infaltable bombo.

Este sábado le contó a EFE que está abierto a subastar su entrañable instrumento musical para hacerle frente a las deudas. “Han venido muchas veces a comprarme el bombo y siempre decía que no lo vendería por nada en el mundo, pero ahora estoy dispuesto a hacerlo”, afirma.

El hincha número 1 de la Furia Roja tenía un bar en Valencia pero ha decidido cerrarlo y sus ingresos cayeron ostensiblemente.

“Gano cuatrocientos euros y pico, que es lo que pago de hipoteca, más los gastos del piso. Con la jubilación ingresaré ochocientos. No sé qué vamos a hacer, pero tengo que comer y no sé si subastar el bombo”, expresó.

Manolo cuenta que “me he gastado todo mi dinero en el fútbol y por el fútbol, pero estoy muy orgulloso de todo”.