Brasil se llevó el oro en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 luego de superar a España, en un partido que finalizó 1-1 en el tiempo regular lo que obligó a que se disputara una prórroga y que se definió gracias a una anotación en el 108′ de la prórroga por parte de Malcom que puso el 2-1 decisivo.
Fue un partido entrentenido y con dominio compartido en cada tiempo. En la etapa inicial la Canarinha fue el equipo que impuso condiciones y pudo haberse ido adelante el 38′ pero Richarlison en un lanzamiento de penal mandó la pelota a las nubes y el empate siguió en el marcador.
Sin embargo la ventaja llegó a segundos del descanso cuando Matheus Cunha aprovechó dentro del área un horror defensivo de los ibéricos, que no rechazaron una jugada que parecía de rutina haciendo que quedara viva dentro del área y eso no lo desaprovechó el delantero brasileño.
Para la segunda mitad y urgidos por el resultado, España se volcó a la ofensiva y consiguieron la igualdad al 61 con una gran definición de primera por parte de Mikel Oyarzabal luego de un preciso centro de Carlos Soler desde la derecha que ilusionaba a su equipo con la remontada, de la que estuvieron cerca.
Pero el gol de la Roja europea no llegó y en una nueva prórroga para ellos terminaron cayendo con una anotación al 108′ por parte del ex de Barcelona, Malcom, quien en un contragolpe se sacó a fuerza de velocidad a Jesús Vallejo y definió en el mano a mano. Brasil se colgó el oro olímpico por segunda vez consecutiva y se sacó un poco la espina de haber perdido la pasada Copa América ante Argentina en el Maracaná hace menos de un mes.