Kylian Mbappé ha dado pruebas de estar camino a convertirse en uno de los mejores futbolistas del mundo, incluso cuando se equivoca.

Fue el caso de este miércoles, en que el delantero estuvo cerca de timbrar uno de los mejores goles de la temporada al rematar de rabona en la Copa de Francia.

Cuando el PSG hacía una fiesta del partido que le ganó por 6-1 a St. Ettiene, el ariete recobió un centro rasante de Edinson Cavani y casi apunta al ángulo de la portería rival.

La maniobra dio rápidamente la vuelta al mundo y quedó como botón de muestra de un encuentro en el que los parisinos mostraron todo su potencial.