Hace una semana, Universidad de Chile femenino sorprendió al anunciar que Natalia Campos debía someterse a una delicada cirugía cerebral y sería baja por tiempo indeterminado en el Campeonato Femenino. Días después, la golera pasó por el quirófano, de forma exitosa, para la extirpación de un tumor en el cerebro.

El médico que la operó habló de la gravedad de la condición de la arquera y por qué tenía que actuar lo más pronto posible. André Fassler, neurocirujano de la Clínica Universidad de los Andes, dialogó con LUN y se refirió al procedimiento, donde se extirpó un “quiste coloideo en el tercer ventrículo del cerebro”.

“Son lesiones infrecuentes y no hay una causa específica. Ella probablemente va a tener que estar un tiempo sin jugar fútbol, pero debería evolucionar bien. Hay que esperar el resultado de la biopsia para saber cuál es el tipo específico de tumor que tenía Natalia, pero al parecer es una lesión benigna”, dijo.

“No había ninguna posibilidad de postergar esta cirugía, estaba con riesgo vital. Estas lesiones no son tan grandes, pero están super mal ubicadas, en una posición que obstruye la salida de líquido cefalorraquídeo”, explicó después.

Hace una semana, la U anunció que Natalia Campos debía operarse. La cirugía fue exitosa y la portera podrá volver a jugar en el futuro | U. de Chile

“En el caso de ella, el tumor debe haber tenido poco más de un centímetro, pero estaba ubicado justo en una zona que con un par de milímetros se obstruye. Más que por el tumor mismo, el riesgo es por la ubicación y la hidrocefalia que produce y puede provocarle la muerte”, explicó.

Operación exitosa

Fassler contó a Campos se le descubrió el quiste “hace muchos años”, pero que su situación se volvió crítica la semana pasada. “Empezó con sintomatología, la controlamos y había tenido una dilatación de los ventrículos, que es una estructura que tiene líquido dentro del cerebro. Eso tenía riesgo vital”, dijo.

La futbolista desarrolló una hidrocefalia, algo que “puede llegar a provocar la muerte del paciente”. “Estaba con dolor de cabeza, náuseas y empezó con compromiso neurológico, que es sugerente de hipertensión. En los últimos meses, empezó a sentirse diferente”, contó el médico.

“Se trató su hidrocefalia con un drenaje y después se hizo la cirugía de lesión tumoral”. La cirugía fue exitosa, de acuerdo a lo que confirmó la U y reiteró el neurocirujano. “La operación anduvo bien en cuanto al tiempo quirúrgico y la evolución. Ella está sin secuelas desde el punto de vista neurológico”, afirmó.

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