La Roja femenina conoció su camino para el repechaje de la Copa del Mundo 2023, que jugará en febrero próximo, hace una semana. Será frente al ganador del partido entre Senegal y Haití que la selección chilena dispute el encuentro que entregue un boleto directo para la cita planetaria.
El equipo que dirige José Letelier solamente tendrá una fecha FIFA adicional antes de jugar el torneo de play-offs, en noviembre del 2022. Por esa razón, el seleccionador nacional comenzará con microciclos de entrenamiento a partir de ahora y así trabajar con las jugadoras locales de antemano.
Entre el 24 y 27 de octubre, 12 futbolistas entrenarán en Juan Pinto Durán en el primer proceso de preparación con los posibles rivales ya definidos. Solo cuatro clubes de la zona central prestaron a sus jugadoras, que no compartirán con miembros de la U o Santiago Morning, que están disputando la Copa Libertadores Femenina.
Siete jugadoras vienen de Colo Colo en la presente nómina: Antonia Canales, Fernanda Hidalgo, Fernanda Ramírez, Michelle Olivares, Yastin Jiménez, Javiera Grez e Isidora Olave. Además, están Millaray Cortés de Universidad Católica y Thiare Parraguez de O’Higgins.
Cierran el listado tres provenientes de Palestino: la portera Valeria Rojas, la defensora Yocelyn Cisternas y la volante Ivette Olivares. Solamente futbolistas del medio local fueron convocadas, ya que no es ventana de selecciones oficial.
Entre el 7 y 15 de noviembre, la Roja Femenina jugará dos amistosos ante una selección por confirmar. El estadio Sausalito de Viña del Mar será una de las sedes que alberguen los partidos, ya que el otro será en Santiago.