Jorge Valdivia ingresó junto a Esteban Paredes en el partido de Colo Colo ante Everton. Rápidamente, metió una gran pelota en profundidad que encontraba a Gabriel Costa solo pero que se la topó Visogol antes. Tras cartón, fue a pelear otro balón y ahí vino el momento fatídico.
Corría el minuto 74 del encuentro y, rápidamente, el Mago se tocó una pierna. Se tiró al suelo, fue chequeado por el kinesiólogo del Cacique, Wilson Ferrada, y abandonó la cancha con sólo 10 minutos de acción. Compungido, se sentó en el banco y celebró el triunfo albo como un hincha más.
Esta tarde, Valdivia acudió a clínica MEDS para realizarse los exámenes médicos de rigor. Se le vio tranquilo, aunque algo resignado.
“No me han dicho todavía. ¿Lamentable? No hay lesión que no sea lamentable. Tengo que esperar”, comentó a la prensa apostada en el lugar antes de abordar su auto.
Ante las preguntas, el Mago recalcó que “no soy doctor ni kinesiólogo para saber si es una cosa o la otra. Hay que esperar nomás ahora, ¿dale?”, para luego encender su vehículo y retirarse a su hogar.
Los exámenes determinarán si fue una contractura o no, pero si es un desgarro, Jorge Valdivia corre serio peligro de haber jugado su último partido con Colo Colo, al menos por este Campeonato Nacional.