No quiso hacer un balance general, pero al menos Javier Castrilli puso sus fichas sobre le nombre de Roberto Tobar, de quien manifiesta tener la mejor impresión con su labor dentro de la cancha de fútbol, por lo que será su foco a seguir en su mandato en la Comisión de Árbitros de Chile.
“Sería una irrespetuosidad hacer un juicio de valor público sobre el arbitraje chileno. Necesito que entiendan la responsabilidad tan delicada que este cargo. Sí puedo decir, como siempre lo he manifestado, a mi humilde criterio, que Roberto Tobar es por lejos el mejor de América y lejos“, destaca Castrilli.
No sólo eso, porque la figura de Tobar es llamada a ser un ejemplo en su gestión que comenzó en esta jornada al mando de los árbitros, donde tiene claro que ha marcado un
“A mi criterio, está dentro de los tres o cuatro mejores del mundo. Fundo mi opinión en algo que es innato que es su jerarquía. Tobar, aunque no haga nada, ya está marcando diferencias. El fenómeno Tobar todos los chilenos tenemos que tomarlo como ejemplo, ese es el norte”, destaca el nuevo jefe de los árbitros.
En ese sentido, también destaca que el trabajo con su equipo tendrá un profundo análisis de lo que está pasado con los jueces, en donde espera dar oportunidades a todos y devolver la confianza a los hombres de negro.
“Necesitamos formar a la persona humana para después conseguir árbitros. En la construcción de ese árbitro del futuro tener un arquetipo de hombre y mujer de bien. Que cuando uno cometa un error tenga seguridad de que se está equivocando. Tenemos que guardar un respeto por el arbitraje. En las próximas horas tendremos reuniones donde evaluaremos todos y cada uno de los casos. En nuestra gestión se debe caracterizar por igualdad de oportunidades para todos. Primero considerar al arbitro como un trabajador y, con el mayor de los respeto, velar por respeto del fútbol chileno, adoptando medidas necesarias y de esa manera devolver la confiabilidad y credibilidad para que todos nos sintamos seguros y tranquilos para el futuro”, cierra.