El fútbol da revanchas, eso es lo que deben estar pensando en Huachipato, porque el equipo de la Octava Región había bajado en cancha a Primera B, pero tras la resta de puntos a Deportes Melipilla, tiene la opción de seguir en la categoría de honor.
Los acereros jugarán la Promoción con Deportes Copiapó, por ende, Mario Salas tiene una nueva vida, y le vuelve a sacar la lengua al Fantasma de la B.
La carrera del Comandante en los últimos años ha estado ligada a la parte baja de la tabla de posiciones, por las malas campañas de los equipos a los que le ha tocado dirigir.
Por ejemplo, empezó muy mal el 2020 con Colo Colo, equipo del cual fue despedido por sumar cuatro derrotas al hilo. Tan abajo quedó el elenco albo que le costó mucho salir del fondo, y terminó jugando el partido por la permanencia, donde le ganó a Universidad de Concepción.
Luego, Salas se fue a Perú para dirigir a Alianza Lima, que estaba complicado en la tabla, y no lo pudo levantar, siendo despedido antes del final del torneo. Los Íntimos de La Victoria perdieron la categoría, aunque luego se salvaron por secretaría tras determinación del TAS.
Tras las malas experiencias en Colo Colo y Alianza, tomó otro fierro caliente: Wadi Degla de la Premier League de Egipto. En África logró que el equipo levantara algo el nivel, pero no fue suficiente, fue despedido otra vez antes de que concluyera el torneo, y el cuadro terminó yéndose a la B, pero sin Salas en la banca en el partido final.
Ahora, en su regreso a Huachipato logró que los de la Usina jugaran mejor, sumaran unidades, aunque no les alcanzó, porque habían perdido la categoría, sin embargo el fallo contra Melipilla les permite jugar con Copaipó para seguir en Primera.
Mario Salas, el Duncan MacLeod del fútbol chileno…