Mauricio Isla tuvo un Clásico Universitario muy especial. La hinchada de la Universidad de Chile se lo hizo saber desde el trabajo físico de precompetencia. Pero el Huaso pasó de recibir esos insultos a erigirse como una gran figura de la goleada por 3-0 que la Universidad Católica le propinó a los azules en el Estadio Nacional.

Parte importante del plan que Ariel Holan diseñó para disputar este compromiso pasó por aprovechar los descuelgues ofensivos del Huaso. Esa sociedad con José Pedro Fuenzalida y César Pinares fue de imposible solución para el Romántico Viajero. El trío comenzó a cimentar la victoria cruzada en los 8', cuando el lateral derecho bicampeón de América con la Roja encontró solo al "29".

Y Pinares abrió la cuenta con un zurdazo rasante que dejó sin chances posibles de reaccionar a Cristóbal Campos. En los 73', como una prueba de que le salió casi todo en el césped ñuñoíno, un rechazo suyo estuvo a punto de sorprender al meta de los azules. 

Corrían los 88' cuando Ignacio Saavedra se dio cuenta de que el "44" estaba resentido. El Nacho hizo el gesto hacia el cuerpo técnico, que tuvo que cambiar sus planes. Bryan González se quedó sin entrar por el dolor que acusó Isla. Tomás Asta-Buruaga tuvo que prepararse para entrar. 

Isla mete una asistencia tras pedir el cambio y se mete al nivel de Parot

Mauricio Isla fue clave en la victoria de la Universidad Católica ante la Universidad de Chile. El Huaso se anotó con dos asistencias. Y una de ellas fue después de haber pedido el cambio. En los 90', el enésimo descuelgue del ex Flamengo terminó con un centro rasante.

La pelota encontró sin marca a Clemente Montes, quien se llevó la mano en la boca para hacer callar a la hinchada de la U tras anotar a la espalda de Yonathan Andía. Así las cosas, Isla suma cuatro asistencias y ya es el máximo habilitador del equipo con el mismo póquer de pases-gol que cosecha Alfonso Parot

"Es un gran jugador. De selección. Es muy claro cuando ataca y eso nos sirve muchísimo", declaró Fernando Zampedri en una conversación con Todos Somos Técnicos para hablar de la importancia que tiene el oriundo de Buin, el futbolista que más diferencia marcó en la edición 195 del Clásico Universitario. Después del pitazo final de Julio Bascuñán, el Huaso tuvo espacio para consolar a Darío Osorio, quien inexplicablemente fue suplente en la U.