Tras años de éxito y alegría los días de miel sobre hojuelas de Universidad Católica parecieran estar sufriendo un duro lapso, luego de que los malos resultados sumados a un camarín supuestamente convulsionado vinieran a agitar las aguas en San Carlos de Apoquindo.

En las últimas horas se filtró una presunta pelea entre Diego, hijo de Gustavo Poyet, y Edson Puch. El analista y el jugador habrían tenido un encontrón en medio de los entrenamientos que casi terminó yéndose a las manos, por lo que debieron ser separados.

El supuesto choque entre el puntero y el hijo del entrenador charrúa no sólo generó preocupación en la fanaticada de los Cruzados, sino también en la opinión especializada, y así lo demostró el periodista Cristián Caamaño en Deportes en Agricultura.

El comunicador se refirió primero a la arista netamente futbolística, donde la franja ha conseguido apenas un triunfo en los diez últimos partidos oficiales.

“El rendimiento deportivo ya tiene preocupada a la dirigencia (de la UC). Si a eso se le agregan este tipo de situaciones nadie puede estar conforme”, comentó el panelista de la 92.1.

En la misma línea, Caamaño realizó un demoledor disgnóstico del presente que vive la Católica bajo el mando de Gustavo Poyet.

“Esta situación pareciera que está a otro nivel. Habría un quiebre total entre algunos jugadores y el cuerpo técnico, y esto explotó en el entrevero entre Poyet y Puch”, explicó.

Universidad Católica ocupa actualmente el cuarto escalón de la tabla de posiciones del Campeonato Nacional con 22 puntos, a tres de distancia del líder, Unión La Calera, que ostenta 25.

Pese a que la situación es dramática para muchos, llegando incluso a haber rumores de un despido de Gustavo Poyet, lo cierto es que el presidente de la UC, Juan Tagle, dejó en claro que la continuidad del DT no está siendo evaluada y el objetivo del tetracampeonato sigue vigente.