Uno de los momentos más duros vividos en Viña 2024 hasta el momento se dio la noche de este lunes 26 de febrero. Y es que Javiera Contador sufrió con el Monstruo luego de la presentación de Andrea Bocelli y se bajó del escenario sin ningún galardón.
El público presente en la Quinta no la dejó presentar su rutina y debido a sus nervios es que tampoco logró hilar bien sus chistes. Por tanto a pesar de subir a la Familia Larraín al escenario es que no pudo contra el tan temido Monstruo.
Uno de los que sabe bien de esto es Ricardo Meruane y es que el humorista chileno también vivió un momento similar durante su última presentación en la Quinta en 2016.
Analizó la rutina
En una conversación con Culto Meruane decidió analizar la presentación de Javiera Contador y cómo la vio desde afuera.
“Pensé yo que como la habían pifiado en Coihueco, esa era una muy buena señal, porque si te pifian antes quiere decir que estás a tiempo como para perfeccionar, para pulirte. Pensé que era un buen anticipo, al revés de lo que pensó mucha gente, es lo mismo que le ha pasado a Luis Slimming que lo han pifiado, quiere decir que está puliendo. Pensé que por eso le podría haber ido mejor“, destacó.
En esta misma conversación destacó que lo crucial fue la entrada con el Monstruo en todo su esplendor y es que el público no dejaba de pifiar en ningún momento.
“Entró con un público adverso. Cuando se supo que Javiera Contador iba con Andrea Bocelli, todos pensamos que público más ideal ¡es una taza de leche! Pero nunca se pensó que Bocelli iba a tener casi Gaviota de Platino, eso fue descolocante“, añadió.
“La rutina en sí la encontré muy vertiginosa, sin remate, no iba para ningún lado. Pero bueno, así es esta cuestión ¿qué le vamos a hacer? Nunca lo tenis seguro, sobre todo en el humor, además que la gente ve eso también si el término humor se inventó con los humoristas“, agregó sobre la rutina de la actriz.
Asimismo Meruane siente empatía por Contador y es que él más que nadie sabe lo que está pasando la actriz debido a lo que vivió en ese mismo escenario pero durante el 2016.
“Aquí es donde hay que probar la fortaleza, yo sé lo que debe estar pasando. Es horrible. Es un proceso igual a cuando se muere un pariente cercano, va a pasar por las cuatro etapas: la negación, la ira, la conformidad y después la pena. Es un proceso complicado. Se va a cuestionar toda su carrera, va a pensar que a lo mejor no sirve para esto. Es complicadito“, finalizó.