Fue un rumor hasta este fin de semana: Claudio Fariña confirmó que está trabajando de garzón en un reconocido restaurant de comida peruana ubicado en la comuna de Providencia. Las razones entregadas por el periodista no son menores y tienen como primordial foco sus hijos.
De acuerdo a sus declaraciones a Glamorama, es "un garzón más, y al final del turno reparto al personal. O sea también Uber. Necesito pagar dos colegiaturas. ¡Somos hijos del rigor!".
Tamaña revelación ahora sirvió para que un medio extranjero tomara el caso de Fariña como ejemplo y evidencia de la crisis laboral que se está viviendo en Chile producto de la pandemia por el coronavirus.
Infobae entonces destaca que "desvinculado de su lugar de trabajo en octubre de 2018, después de casi 20 años de carrera" y, con ello, posteriormente pasan a describir que el comunicador "engrosó la extensa cifra de desempleados en el país, que se disparó de manera exponencial en los tiempos de confinamiento extremo por disposición sanitaria".
"La última medición, del trimestre móvil mayo-julio de 2020, que proporciona periódicamente el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), arrojó un 13,1%, la más alta desde que se tienen registros desde 2010", añade en datos el sitio.
Claudio Fariña fue reconocido rostro de TVN hasta hace dos años. Tras su salida del canal estatal, tuvo otras apariciones en los medios, como comentarista y entrevistado, pero nada de eso lo llevó a sostener su presencia en televisión.
Tiempo después, el reportero apareció nuevamente en los medios por una razón muy distinta a un puesto laboral: fue formalizado después de que la conductora de 24 Horas de TVN y ex esposa, Carla Zunino, lo denunciara por el delito de amenazas en el contexto de violencia intrafamiliar.
Eso hasta que reapareció este fin de semana para confirmar su nuevo trabajo como garzón.
