Cristián de la Fuente se desahogó en pantalla este lunes en Mucho Gusto, tras ser víctima de una encerrona la semana pasada, suceso en el que su hija con Angélica Castro, Laura de la Fuente, terminó con un disparo en su pierna.
“No sigamos normalizando lo que está pasando en nuestro país”, fue lo primero que manifestó el actor en el contacto con el matinal de Mega.
Esto a propósito de que, según él, “la escalada de violencia no tiene límites”, ante un incidente en el que “lo único que hubiera pedido yo es que la bala me hubiera dado a mí y que mi hija no estuviera sufriendo las consecuencias”.
Sobre el suceso en sí, De la Fuente recuerda que “cuando escuché el disparo arrancamos, miré a la Laura que estuviera bien, le miré la pierna y no sabía si era una entrada de bala o si la bala la había rozado, sólo vi el hoyo y no sabía que daño había hecho”.
“Sólo huí y me preocupé de que Laura no se desmayara, me empezó a decir que tenía fatiga, que se sentía mal y veía borroso. Cuando llegó a la Clínica tuvimos que trasladarla a la Clínica Alemana de Vitacura porque en La Dehesa no había pabellón quirúrgico al nivel que se necesitaba para darle tratamiento”, continuó.
Cristián de la Fuente confiesa su miedo tras encerrona y disparo a su hija
En la conversación que sostuvo con Diana Bolocco, Cristián rogó porque “la justicia no puede ser tan suave con estos delincuentes, que no son ladrones, son asesinos”.
“Si alguien disparara o hiciera este tipo de delitos y hubiera una pena en la cárcel que fuera ejemplificadora, uno tendría miedo, pero como no hay consecuencias (…) entonces lo siguen haciendo y cada vez con más violencia”, postuló.
Eso, para luego insistir en que “no podemos vivir en un país que hemos normalizado la violencia, hemos llegado a estos niveles donde damos gracias a Dios que solo nos quitaron el auto, esto no puede pasar”.
“La justicia no puede ser tan suave con estos delincuentes que no son ladrones, son asesinos. Al gobierno anterior se le escapó la violencia de las manos”, sostuvo el actor.