Chelsea disputó la antepenúltima fecha de la Premier League ante el Wolverhampton y el primer duelo de Todd Boehly como nuevo propietario de los blues terminó en un amargo empate. Los blues tuvieron un tímido primer tiempo, donde sufrieron la anulación de un gol, y lograron imponerse en la segunda mitad, pero los Wolves empañaron la alegría azul en los descuentos.
El duelo se definió totalmente en los últimos 45 minutos y fue Romelu Lukaku el que abrió la cuenta. Al 51', una falta contra el delantero belga dentro del área indignó a la fanaticada de los blues y, tras una revisión en el VAR, se cobró penal, el que Lukaku definió sin problemas. El ariete puso el 1-0 y se ganó los aplausos de Boehly, quien observó el partido desde su palco en el Stamford Bridge.
El mismo Lukaku anotó nuevamente solo unos minutos después. Al 57', el delantero marcó un golazo desde fuera del área y desató la alegría del conjunto azul, que se imponía por 2-0. Lukaku no marcaba desde diciembre del 2021 con la camiseta azul y se sumó más aplausos del nuevo propietario del Chelsea.
Pero el descuento de los Wolves llegaría al 79', con un remate de Francisco Trincao desde fuera del área que sorprendió al portero Edouard Mendy. Cuando ya se habían cumplido los descuentos, la defensa azul dejó pasar un gol de Conor Coady que dejó todo igualado en 2-2.
Así, la nueva era del Chelsea inició con un empate que los mantiene alejados de la lucha por el título, pero con posibilidades de llegar a la Champions League. Los blues anunciaron ayer la compra del club hecha por el multimillonario Todd Boehly, quien llega tras la salida del ruso Roman Abramovich.
