No fue un partido espectacular para el Liverpool, de hecho estuvo lejos del nivel al que nos tiene acostumbrado.

Pero el fútbol es un deporte que se gana con goles marcando uno más que el rival, y eso es lo que hizo el cuadro de Jürgen Klopp esta mañana al vencer en calidad de forastero por la cuenta mínima al Sheffield United en el Bramall Lane Stadium.

Un primer tiempo aburrido, donde los Reds no encontraron caminos para llegar al arco contrario, y con un local que dominó pero no tuvo claridad en la puntada final.

El partido estaba pintado sí o sí para un cero a cero final, pero aparecióGeorginio Wijnaldum a los 70 minutos con un remate de fuera del área el que no pudo ser atajado por Henderson, que más que repeler el disparo, la faltó poco para meter el mismo el balón en su propia portería.

Con esta apretada victoria, el Liverpool se afirma en el primer lugar de la Premier League con 21 puntos en siete partidos jugados. Canasta perfecta.