Unión Española deberá moverse a Coquimbo para jugar ante Universidad de Chile, debido a que el Santa Laura está inhabilitado debido a las reparaciones que se están haciendo en el campo de juego. Eso indignó a los hinchas hispanos, que protestaron en el Santa Laura la noche del miércoles.

Barricadas con fuego, lienzos y panfletos contra la dirigencia fueron la tónica, lo cual abordó César Bravo en conferencia de prensa este jueves, entendiendo la molestia de los fanáticos que deberán trasladarse más de 450 kilómetros hasta la IV Región.

"Dentro de las alternativas lo mejor era ir a Coquimbo. No era fácil encontrar un terreno, porque jugar ante la U te hace tener otro tipo de clasificación de partido", comenzó diciendo el estratega de los hispanos.

Luego señaló que "se pierde jugar con nuestra gente, que un aliciente, algo que motiva a los jugadores, pero son situaciones que son así".

Agregó el DT que "uno entiende a la hinchada, por la pasión que tienen y la camiseta de Unión lleva a eso. Pero quemar su propia casa no es bueno, a pesar de que se entiende el malestar generalizado". 

Para este duelo contra la U, los rojos de Santa Laura no podrán contar con los lesionador Bryan Rabello y Vicente Conelli, mientras que también lamentará la ausencia de Stefano Magnasco en la defensa por suspensión.