Unión Española tuvo un duro arranque de temporada en el Campeonato Nacional. De la mano de Ronald Fuentes, no lograron su mejor rendimiento y tras las primeras fechas parecían firmes candidatos a pelear por la permanencia en este 2023. Sin embargo, en los últimos tres partidos han logrado mejorar y sumar siete de nueve puntos para salir de la zona roja.
Todo parecía felicidad en Santa Laura, especialmente tras el triunfo ante Palestino por la fecha 9 del torneo. Un 2-0 que los hispanos celebraron con todo, incluso más allá de lo razonable.
Esto, porque de acuerdo a la versión entregada por Cristián Caamaño en Radio Agricultura, se produjo tras ese partido un serio acto de indisciplina por parte del plantel y que esto habría llevado a que la situación dentro del camarín se haya quebrado por completo.
"Fíjate que hace un par de semanas antes del partido contra Copiapó, Unión Española entrenó en Malloco. Ya los jugadores pateaban la perra por tener que viajar 50 kilómetros, les daba lata. Pero aprovechando las cómodas instalaciones decidieron hacer un asado de camadería después de ganarle a Palestino", comenzó relatando Caamaño.
"Uno puso el auto y fueron a comprar los bebestible y entre los bebestibles se coló más de alguno con grado alcoholico. El tema es que se se salió de madres, hubieron entreveros, garabato y cosa subidas de tono", agregó.
"Cuando vieron que la cosa se descontroló y se desbando, hicieron un pacto de silencio entre los presentes. El punto es que alguien quiso quedar bien con el jefe y va y le manda el recado a Jorge Segovia", destacó.
Caamaño agregó que "Segovia quiso nombres, le dan los nombres y le hizo una rebaja salaria como castigo en el mes de marzo y los jugadores no aceptaron ¿Los protagonistas? Manuel Fernández, Jonathan Villagra y Rodrigo Piñeiro, varios jugadores entre ellos Vicente Conelli".
"Se agarraron a combos, agresiones varias y amenazas, temas con alcohol. Cómo no aceptaron la rebaja, el gerente general le dijo a Segovia que no estaban aceptando la decisión, entonces le dijo que ninguno viajaba a jugar contra Huachipato".
"Ronald Fuentes tenía dos caminos: acatar la decisión o desacatar. Bueno, decidió bajarlos de la citación y ninguno estará mañana ante Huachipato", aseguró Caamaño.
"Está todo muy caliente en Unión porque los jugadores se sienten traicionados porque esto era un pacto y alguien lo rompió, no saben quién, puede ser un funcionario de Malloco y ahora están entrenando en la liga oriente de Chicureo".
"El tema es que mañana tienen un partido complicado y no vaya a ser que los jugadores empiecen a ser causa común con los castigados y vaya a ver un colchón Rosen King contra los dirigentes o Ronald Fuentes", cerró.
Vale recordar que Unión jugará este miércoles el último partido pendiente del torneo. Será ante Huachipato, segundo en la tabla, a las 19 horas, en el CAP de Talcahuano.
