Nano Calderón permanece en la cárcel Santiago 1 cumpliendo con su prisión preventiva, en tanto que múltiples reos del penal han intentado contactarse con él para ofrecerle el beneficio de la “protección”, mientras dure su estadía.

De acuerdo con declaraciones anónimas de gendarmes a La Cuarta, “varios reclusos llegaron a la mañana siguiente de su llegada al ASA ‘con la segunda’. O sea, diciendo que se sentían mal, que tenían heridas infectadas, pero lo que realmente querían era ver a Hernán Calderón Argandoña“.

Esto con la idea de “para ofrecerle protección durante el tiempo que esté encerrado a cambio de dinero. En la cárcel se vive la pobreza y él en este momento es una mina de oro”.

Por el momento, el hijo de Raquel Argandoña se ha mantenido alejado de los conflictos, “no ha tenido problemas con los funcionarios y está dispuesto a seguir las indicaciones del personal médico”.

Calderón actualmente se encuentra cumpliendo con los 14 días de cuarentena, antes de pasar al llamado Módulo 11, sector donde son “acomodados” los individuos que han cometido delitos de alta connotación pública, famosillos o ex funcionarios de FF.AA. y de Orden.

Tal cambio a motivado la preocupación del joven de 23 años, ya que deberá dejar su aislamiento y compartir con otros reclusos del lugar.

Los funcionarios del recinto aclara que “es un módulo mucho más tranquilo que los otros. De que hay peleas, las hay, pero en menor medida que en las demás”.

“Por eso es que le quieren ofrecer protección, porque se sabe que cuenta con recursos. Así es el mundo de la cárcel”, añadieron.

Nano Calderón en su mediática llegada a Santiago 1.