Nicolás Jarry le ganó en el debut de Wimbledon a Holger Rune, el danés 8 del mundo, que tras el encuentro se sacó los pillos asegurando que estaba lesionado y desmereciendo el triunfo del chileno.
“En condiciones normales, le gano en 9 de 10 partidos”, señaló el europeo en una declaración digna de uno de los “chicos malos” de este deporte, por la fama que se ha hecho.
Es que además Rune es conocido por ser uno de los jugadores que más raquetas rompen en el circuito. Un asunto que a su auspiciador, Babolat, no le hace ninguna gracias.
En el certamen londinense así lo dejaron claro. “No es nuestra intención promover las raquetas rotas”, dijo al sitio Clay Marion Cornu, líder de negocios de tenis en Babolat.
Rune vende las raquetas que rompe
Esto a raíz de una publicación que el propio danés hizo en su tienda virtual, donde ofrecía sus raquetas rotas como objetos de colección. ¿El precio? Por las nubes: 7.231 dólares cada una (siete millones de pesos aproximadamente).
Cornu manifestó su desagrado por esta “oferta” que muestra el tenista de 22 años, pues entiende que no debe ser material de venta una raqueta destrozada.
“Estamos en conversaciones con su agente. Obviamente, no es nuestra intención promover las raquetas rotas. Tenemos que ser coherentes con nuestros valores, así que estamos trabajando en ese tema con sus representantes”, manifestó el representante de Babolat.