La comunidad científica se ha puesto en alerta ante la aparición de una nueva variante COVID. Se trata de Ómicron, la variación más reciente del virus que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) es una “variante de preocupación”.
En un principio fue conocido como B.1.1.529 y también se le llamó Botswana, Bélgica, Hong Kong e Israel. La OMS advierte que Ómicron podría implicar un mayor riesgo de reinfección.
Todo indica esta variante se originó en Sudáfrica, porque es en los países de esa región donde mayormente se concentran los casos. Aunque también se ha detectado en Egipto y Bélgica.
La preocupación es tal, que naciones como Estados Unido, Francia, Alemania, Japón y el Reino Unido han impuesto restricciones a la llegada de viajeros de Sudáfrica, Botsuana, Zimbabue, Namibia, Lesoto, Esuatini (Suazilandia), Mozambique y Malaui.
¿Por qué la Nueva Variante COVID genera preocupación?
Los expertos explican que la variante Ómicron genera preocupación por su rapidez de evolución, considerando que ha mutado mucho en poco tiempo.
Esto significa que el virus ahora es muy diferente al original de China. Es decir, las vacunas diseñadas para la original, podrían no ser tan eficaces para Ómicron.
Por otro lado, pese a que por ahora no se puede asegurar que causa mayor gravedad, algunos análisis indican que existe la posibilidad de que tenga un impacto diferente en los infectados.
De todas formas, es muy pronto para sacar conclusiones. Por tanto se deberá esperar a los estudios que entreguen un panorama más claro sobre esta nueva variante COVID.
