El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, los hinchas chilenos y la posibilidad de un atentado a la delegación de Catar son las tres principales preocupaciones de la Policía de Sao Paulo de cara a la Copa América, que comienza el próximo 14 de junio precisamente en el estadio Morumbí.

La capital paulista tiene dos sedes -Morumbíy la Arena Corinthians- y las autoridades anunciaron que tendrán los mismos protocolos de seguridad utilizados en el Mundial de 2014, “con la diferencia de algunos ajustes en puntos que tenían que ser mejorados”.

Chile debutará en Copa América ante Japón en Morumbí, el 17 de junio.

Bolsonaro es una llamada de alerta porque estará a cargo de la inauguración del certamen en el partido entre Brasil y Bolivia. Catar, por su parte, atrae la atención por un posible atentado a su delegación o hinchas.

Y los chilenos, por el bochorno protagonizado precisamente en el Mundial de 2014, cuando decenas ingresaron por sobre las barreras al centro de prensa del estadio Maracaná. En total, 104 de los 26 mil hinchas de la Roja que fueron al Mundial sufrieron alguna detención.

Además, los fanáticos nacionales acumulan un vergonzoso prontuario que se suma a los disturbios protagonizados por hinchas de Colo Colo y Universidad de Chile en sus últimas visitas por Copa Libertadores y Copa Sudamericana respectivamente.