El tenis chileno avisó que estaba de vuelta en 2018, pero en 2019 simplemente dio un salto de calidad, recordando incluso las gestas de Fernando González, Nicolás Massú y Marcelo Ríos, porque Cristian Garin le demostró al mundo que estaba hecho un Tanque.

El ariqueño confirmó su alza de fines del año pasado, de la mano del coach argentinoAndrés Schneiter, porque ya en la gira de arcilla de Sudamérica metió su primera final. Tras una semana de ensueño, llegó al partido por el título ante el transandino Guido Pella en Sao Paulo. Pero el zurdo fue mejor, y con un 7-5 y 6-3 se quedó con la corona.

Lo que ocurrió en el polvo de ladrillo paulista fue un aviso, ya que semanas después Garin iba a decir que Chile volvía a tener un campeón de un torneo ATP tras 10 años. ElFayez Sarofim & Co. U.S. Men’s Clay Court Championship, más conocido como ATP 250 de Houston,fue el escenario perfecto para ver la consagración del Tanque. Pablo Cuevas, Jeremy Chardy, Henri Laaksonen, Sam Querrey y Casper Ruud fueron las víctimas. El país otra vez celebraba gracias a la raqueta.

“Quiero agradecer a mi equipo, a Paul Capdeville (uno de suscoach), a la gente de Chile, muchas gracias por venir a apoyarme,y quiero agradecer a la organización, a los sponsors, este es mi torneo favorito ahora y espero volver el año que viene”, dijo Garin tras la victoria en Estados Unidos.

El título de Garin en Houston

Pero a Cristian Garin se le abrió el apetito, quería más, y lo tuvo, porque ya en Europa iba a alzar su segundo título. En el ATP de Múnich logró el campeonato, y además, la mejor victoria de su carrera, porque en los cuartos de final dejó en el camino al alemán Alexander Zverev (3° del mundo por aquellos días) por 6-4, 5-7 y 7-5. El mundo ya lo miraba diferente.

Luego de ello vinieron días irregulares, como suele pasar en este deporte, pero igual se las arregló para sumar victorias resonantes como sobre John Isner en el Masters 1000 de Montreal, y los cuartos de final en París-Bercy.

Garin tuvo un año redondo, y sus 32 victoria y 24 derrotas así lo confirman.

Un Príncipe irregular

El otro componente de la “mini armada” chilena en el circuito es Nicolás Jarry. El Príncipe empezó con problemas el año, tuvo un alza, y luego acabó con malas sensaciones la temporada, cambiando a su entrenador Martín Rodríguez, y contratando al ex coach de Kei Nishikori, el también argentino Dante Bottini.

Jarry celebró en Bastad

Los números finales del Príncipe lo dicen tuvo, porque acumuló 19 victorias y enganchó 21 derrotas, pero no todo fue negativo, porque en 2019 sumó su primer título de su carrera, en el ATP 250 de Bastad, donde venció en la final al argentino Juan Ignacio Lóndero.

El nieto de Jaime Fillol, además, hizo final en el ATP de Ginebra,se colgó la medalla de oro en el dobles mixto de los Juegos Panamericanos junto a Alexa Guarachi, y fue campeón en duplas con el argentino Máximo González en el ATP 500 de Río de Janeiro.

A las finales de la Copa Davis

Chile además fue parte de la histórica nueva Copa Davis, esa que está a cargo de la empresa Kosmos, propiedad del futbolista Gerard Piqué, y que tuvo su estreno con las Finales de Madrid, donde fue campeón el local España, de la mano de Rafael Nadal.

El equipo de Nicolás Massú clasificó al ex Grupo Mundial tras ganarle el repechaje a Austria de visita, con los dos triunfos de Nicolás Jarry en el singles, más el punto final que dio Garin ante Radionov, para estructurar el 3-2.

En la Caja Mágica los resultados no fueron los mejores. Chile perdió por paliza en su debut ante Argentina, incluso no le sacó ningún set a los transandinos, pero mejoró ante Alemania, con quien perdió 2-1, sumando el único punto gracias a la victoria de Garin sobre Jan-Lennard Struff.

Chile deberá jugar el repechaje en marzo próximo, para jugar las Finales de la Davis en 2020, y su rival será Suecia en Estocolmo.

Regreso del ATP

Otro de los hechos que valoran los fanáticos del tenis es el regreso del ATP a Chile, porque desde el 24 de marzo al 1 de marzo.

En primera instancia se había dicho que el Estadio Nacional iba a recibir el evento, pero se trasladará a San Carlos de Apoquindo.