Ante un repleto Stadio San Siro, Andrea Pirlo se retiró oficialmente del fútbol activo con un partido de estrellas internacionales donde no faltaron las emociones y las lágrimas. El resultado final 7-7 fue el corolario para una jornada llena de agasajos para el gran cerebro del calcio italiano durante este milenio.
El único chileno invitado fue [[Arturo Vidal]], quien fue compañero de Pirlo durante cuatro años en la Juventus. El Rey Arturo, eso sí, sigue convaleciente de una lesión de rodilla, por lo que no pudo actuar. En cambio, lo representó en la cancha su hijo mayor Alonso, quien se dio el lujo de patear la pelota en el imponente estadio milanista.
El momento especial se produjo al minuto 81 del encuentro de exhibición, cuando Pirlo dejó la cancha para ser reemplazado por su hijo Niccolo. El balance final incluyó a Filippo Inzaghi como figura, con tres goles, y a Bobo Vieri con la más grande ovación, tras anotar gracias a un fino pase filtrado del Maestro.
Las estrellas que asistieron a la velada se dividieron en dos equipos, donde abundan los campeones del mundo y jugadores que, pese al tiempo, se mantienen vivos en el recuerdo de los tifosi que acompañaron la carrera de Pirlo en Inter, Milan y la Juve.
White Stars: Abbiati, Dida; Bonucci, Chiellini, Costacurta, Favalli, Jankulovski, Maldini, Nesta, Oddo, Simic, Zambrotta, Zanetti; Baronio, Camoranesi, Gattuso, Lampard, Leonardo, Pepe, Pirlo, Rui Costa, Verratti, Vidal; Baggio, Del Piero, Di Natale, Iaquinta, Inzaghi, Matri, Pato, Ronaldo, Totti, Vieri.
Blue Stars: Buffon e Storari; Adani, Barzagli, Bonera, Cafu, Diana, Ferrara, Kaladze, Materazzi, Serginho; Pirlo, Albertini, Ambrosini, Brocchi, De Rossi, Diamanti, Marchisio, Perrotta, Seedorf; Borriello, Cassano, Quagliarella, Ronaldinho, Shevchenko, Tevez, Toni, Ventola.
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