Lamine Yamal, a sus cortos 17 años, es un futbolista que declara con una madurez extraordinaria. Eso explica que haya sido figura en la Eurocopa que ganó la selección de España hace un año y en el título ganado con Barcelona esta temporada.
En una entrevista que dio a la Cadena Ser, en la previa del duelo ante Francia por las semifinales de Nations League, sorprendió al hablar como un experimentado e incluso dar un consejo que pueden recibir los jóvenes futbolistas chilenos.
Esto es enfocarse en su carrera y no en cosas externas que se leen en el teléfono, como lo señaló tras el duelo de ida de Champions League, ante el Inter de Milán.
“Empatamos 3-3. No miro mucho el móvil después del partido, porque estaba pensando en lo que había pasado, ya que para mí hicimos un muy buen partido y no sacamos la victoria”, manifestó asegurando que el celular no debe ser primordial.
De todas maneras indica que cuando revisa lo que opinan de su juego “sí me pone orgulloso que digan que lo hiciste muy bien tus propios rivales, tus compañeros y los periodistas, es algo que te tiene que dar orgullo”.
La carrera en alza de Lamine Yamal
Lamine Yamal manifestó que “mi carrera está siendo de chispazos, contento por los cambios, son para bien. Al principio era como un niño, ahora sólo mi madre me toma como un niño”.
Explica que esta transformación “es algo natural que te pasa cuando estás con gente más grandes, estás con hombres y no con niños”.
Señaló además que su mentalidad es ganadora. “Cuando uno debuta muchas veces salen las cosas bien. Lo difícil es mantenerse, se dan cuenta que quiero mantenerme en el Barcelona”, afirmó.
De hecho se define como “un jugador que tiene buenos momentos, entre más dificultades tiene el partido, mi nivel va subiendo. Soy un jugador de ese tipo, me doy cuenta que saco un mejor nivel”.
Finalmente sostiene que debe seguir progresando. “Año a año mejoraré. Debo hacer más goles, dar más asistencias, estar mejor físicamente y así poder ayudar al equipo”, sentenció.