Independiente sigue sufriendo. Tras el fallo de la Conmebol para descalificarlos de la Copa Sudamericana, debieron luchar para levantar la clausura de su estadio de cara a los partidos por el torneo local.
Lo consiguieron, pero a medias: esto porque en Argentina le anunciaron que las tribunas Pavoni Alta y Pavoni baja, donde se ubicaron los hinchas de la Universidad de Chile, no podrán estar disponibles por los próximos dos partidos.
“Se habilita el estadio, pero a las 3 o 4 horas sale a través de Aprevide (organismo que regula el deporte en Argentina) que tiene inhabilitadas las dos tribunas, que son 13 mil lugares menos”, manifestó el periodista partidario Damián Irribarren.
“Le notificaron que tenía aforo reducido ante Banfield y San Lorenzo, hubo este llamado al presidente Néstor Grindetti”, aclaró por lo que empezó una movida desesperada de Independiente para revertir el asunto.
Independiente es castigado en Argentina
Contó que el dirigente del Rojo empezó a operar políticamente. “Grindetti habló con Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos Aires, después de que daban que Independiente tiene sancionado por dos partidos Pavoni alta y Pavoni baja”, estableció.
“Me cuentan que le dejó bien en claro que esto no es político, no hay animosidad con respecto a este tema“, aclaró sobre este nuevo castigo que pesa con el club trasandino.
“Era para ver qué onda, por qué si está el plan de seguridad que pidió el juzgado sigue esta restricción. A partir de ayer, Independiente está intentando que sean habilitadas las dos, la alta y baja“, manifestó.
Finalmente dijo que “en caso de que sea negativa la respuesta, pide que al menos se habilite Pavoni baja. Una vez que tengan la respuesta de Aprevide, comunicará el canje de entradas”.